Cuando se idea un menú especial la mayor parte de la gente tiende a pensar en alternativas originales, diferentes o propias de tal celebración sin prestar mucha atención en que sea un menú equilibrado y sano. Como había comentado en mi entrada anterior, solemos sentir esa gran necesidad de agradar a nuestros invitados con platos especiales que generalmente utilizan técnicas de cocina e ingredientes poco saludables. Se abusa de fritos, rebozados o guisos grasos; en postres se utilizan harinas refinadas, azúcar y apenas hay fruta; en platos principales se presta poca atención a incluir verduras o legumbres, etc.